viernes, 6 de abril de 2012

Waddlin' around!

Dentro de la prolífica escena garagera de la última década, uno de los grupos que más me han interesado han sido King Khan & BBQ Show. Dos canadienses que, a pesar de haber tocado anteriormente en varios grupos de su Montreal de procedencia, acabaron asentando su base de operaciones en Alemania. Los caprichos del destino son inescrutables, y a pesar de lo exótico que puede parecer, teniendo en cuenta de dónde vienen y dónde estaba el epicentro de la "escena", fueron poco a poco consolidándose y alcanzando un relativamente importante reconocimiento dentro del mundillo.

Su primer disco fue King Khan and BBQ Show. Goner Records lo sacó en 2005, pero dos años después lo reeditó In The Red Records, y precisamente esta reedición y el bombo que se le dió en su momento hizo que los descubriera, ya que por entonces era una fiel seguidora de todo lo que saliera de esa casa.








Desde que suenan los primeros segundos de Love you So, en los que una ruidosísima batería y una jocosa pandereta abren paso a uno de los riffs más contagiosos de los ultimos años, sin exagerar, te puedes hacer idea del disco que tienes delante. Porque el patrón no varía mucho durante el resto de canciones: un set de temas verbeneros y jocosos, garage de lo más exquisito y una reminiscencia oldies de lo más efectiva, con desde doo woop y el rock and roll, como la clásica Waddlin' around, hasta los más descarados acercamientos al punk más sucio, en Fish Fight o la cabreada Hold Me Tight. En este momento es perceptible que King Khan y BBQ tienen algo que les hace diferentes, son electrizantes y estridentes, y aplican la misma fórmula de garage de siempre, pero hay algo en ellos que les hace especiales. Suenan frescos y jóvenes pero sólidos. Y funcionan.

Por supuesto, a mitad de la cara A aparece la balada Bimbo's Theme, en los que King Khan nos muestra su lado más sentimental, pero siendo fiel al espíritu del disco, con rabia y una voz de calidad discutible.

Outta My Mind es el tema perfecto. Está tan bien estructurado como complementadas las guitarras rítmica y melódica, aprovechando ambas para lucirse de modo especial. Es una maravilla, transmite perfectamente el odio que sufre el pobre King Khan, que se encarga de decirnos directamente durante el solo que su chica "ripped his heart". ¡Puro sentimiento!
Take me back recupera el ritmo jovial de los primeros temas, es un clásico y genuino tema de rock and roll.

En caso de que en este punto se nos baje el pulso, si es que es posible, Pig Pig sale al rescate como el tema más atronador y rápido del disco, dejando que volvamos a tragar saliva con la otra balada, Am I the One, una preciosidad de dos minutos doo wop en la que King Khan se olvida de la pandereta durante un momento.
Y es imposible llegar a aburrirse cuando, ya en el tramo final del disco aparece el tema más poppy y delicioso del disco, Got it Made, antes de despedirse con Lil' Girl in the Woods y Shake Real Low, que cierra el disco de la mejor manera posible: con un temazo que nos hace levantarnos del sillón, marcar el ritmo con el pie y cantar los coros mientras bailamos un poco de rock and roll!